El camino primitivo

El Camino Primitivo es uno de los Caminos del Norte, una ruta de interior alternativa al Camino de la Costa del Norte (el Norte). Cuando un peregrino por el Norte llega a Villaviciosa en Asturias, puede desviarse para dirigirse a Oviedo, donde comienza el Camino Primitivo. Eso significa que el peregrino llegará a Santiago por el interior de Asturias (no por la costa), pasando por la antigua ciudad romana de Lugo. Los Caminos del Norte fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en julio de 2015.

Hace unos doce siglos se descubrió la tumba de Santiago Apóstol. La noticia del descubrimiento se extendió rápidamente por los reinos hispanos de la época y por toda Europa. En los siglos siguientes cientos, luego miles de cristianos caminarían a Santiago en peregrinación. La primera peregrinación que conocemos es la que realizó el rey Alfonso II a principios del siglo IX, comenzando en Oviedo (que entonces era la capital de España). Esa ruta ahora se llama el Camino Primitivo.

El Camino Primitivo también es utilizado por los peregrinos que recorren la ruta francesa y deciden girar hacia el norte en León para visitar la imagen de Nuestro Salvador en la Catedral de Oviedo. Desde allí siguen el Camino Primitivo a Santiago.

Así, el Camino Primitivo parte de Oviedo, recorre el montañoso occidente asturiano hasta Lugo, y luego hasta Melide, donde se une con el Camino Francés unos 54 km antes de Santiago. Algunos libros y guías online siguen diciendo que el Camino Primitivo se une al Camino Francés en Palas de Rei. Esto se debe a que hasta hace poco el marcaje entre Lugo y Melide no era bueno. Así, era más fácil encaminar a los peregrinos por Palas, más cerca de Lugo, donde se incorporarían al Camino Francés con su señalización superior. Lo cierto es que el Camino Primitivo se une al Camino Francés en Melide después de que el peregrino haya recorrido la Serra do Careón.